Interior del Templo
El interior está compuesto de tres naves, la central más ancha que las laterales, con bóvedas de crucería. En las naves laterales existen ventanas circulares artísticamente enmarcadas que cierran vidrieras, representando el símbolo de la Congregación (una “S” atravesada por un clavo) ocho en total.
La nave central se ilumina con ventanas trilobuladas con vidrieras con el anagrama de Jesucristo y está separada de las laterales por arcos sobre pilastras cajeadas, en cuyas enjutas aparece una bella decoración vegetal.
A los pies del Templo está situado el coro, donde se encuentra un monumental Órgano de Ecos de la Casa Elizagaray de Azpeitia, que data de 1922. A los lados del órgano se pueden observar dos pinturas de José María Sert, realizadas con el estilo pictórico grisalla. Esta técnica pictórica está basada en una pintura monocroma que produce la sensación de ser un relieve escultórico.
Pincha en las fotografías para verlas con más detalle
Vista de las tres naves del Templo, la central más ancha y alta que las laterales.
Vista de la parte superior de la nave central donde se aprecian sus bóvedas de lunetos, que terminan en ventanas trilobuladas..
Vista de la nave lateral y de sus ventanas artísticamente enmarcadas con vidrieras circulares.
Cada una de las ocho vidrieras circulares situadas en las naves laterales que representan el símbolo de la Hermandad, una “S” atravesada por un clavo.
Vista de la nave central separada de las laterales por arcos sobre pilastras, en sus enjutas puede apreciarse su decoración vegetal.
Vista de la zona del Templo donde está situado el coro con el monumental Órgano de Ecos.
Órgano de Ecos de la Casa Elizagaray de Azpeitia (1922).
Grisalla de
José María Sert que puede verse al lado izquierdo del órgano.
Grisalla de
José María Sert que puede verse al lado derecho del órgano.